Los nuevos datos del Observatorio de rayos X Chandra de la NASA sugieren un remanente de supernova muy distorsionada puede contener el más reciente agujero negro formado en la Vía Láctea. El remanente parece ser el producto de una explosión rara en la que la materia es expulsada a alta velocidad a lo largo de los polos de una estrella giratoria.
El remanente, denominado W49B, es alrededor de mil años como se ve desde la Tierra y situado a unos 26.000 años luz de distancia.
"W49B es el primero de este tipo que se descubrió en la galaxia", dijo Laura López, quien dirigió el estudio en el Instituto de Tecnología de Massachusetts. "Parece que su estrella madre puso fin a su vida de una manera que la mayoría de los otros no lo hacen."
Por lo general, cuando una estrella masiva se queda sin combustible, la región central de la estrella colapsa, lo que provocó una cadena de acontecimientos que culminan rápidamente en una explosión de supernova. La mayoría de estas explosiones son generalmente simétrica, con el material estelar disparando más o menos uniformemente en todas las direcciones.
Sin embargo, en la supernova W49B, el material cerca de los polos de la estrella giratoria condenada fue expulsado a una velocidad mucho más alta que el material que emana de su ecuador. Jets tiro lejos de los polos de la estrella en forma principalmente de la explosión de la supernova y sus secuelas.//
New data from NASA's Chandra X-ray Observatory suggest a highly distorted supernova remnant may contain the most recent black hole formed in the Milky Way galaxy. The remnant appears to be the product of a rare explosion in which matter is ejected at high speeds along the poles of a rotating star.
The remnant, called W49B, is about a thousand years old as seen from Earth and located about 26,000 light-years away.
"W49B is the first of its kind to be discovered in the galaxy," said Laura Lopez, who led the study at the Massachusetts Institute of Technology. "It appears its parent star ended its life in a way that most others don't."
Usually when a massive star runs out of fuel, the central region of the star collapses, triggering a chain of events that quickly culminate in a supernova explosion. Most of these explosions are generally symmetrical, with the stellar material blasting away more or less evenly in all directions.
However, in the W49B supernova, material near the poles of the doomed rotating star was ejected at a much higher speed than material emanating from its equator. Jets shooting away from the star's poles mainly shaped the supernova explosion and its aftermath.